El proyecto del Socialismo Bolivariano (socialismo comunitario) tiene implícito la necesidad de refundación y en algunos aspectos creación de una nueva espiritualidad para la vida. Esto se dice fácil, pero representa una transformación que trascienda la cosificación, mistificación y mitificación de la Comuna, propios de la racionalidad moderna y su lógica capitalista.
La Comuna en términos de nuestro Chávez “es el núcleo para el vivir viviendo”, para ello debe producirse la consciencia y autoconsciencia común, como aspecto fundamental para una nueva cultura de la vida, que debería ser: holística, integradora, solidaria y de abundancia. Donde la energía, los sentires, saberes, haceres y conocimientos de las personas, estén en equilibrio con la naturaleza, convirtiendo a la comunidad en un espacio mucho más vivible, atractivo y proactivo, capaz de convocar a sus integrantes a la transformación de nuestro país, iniciando por sus familias y comunidades.
Esto nos coloca como universidad en el desafío histórico de generar procesos para identificar, conocer y reconocer las potencialidades, así como debilidades no sólo de carácter conceptual, sino además práctico-organizativo, que se vienen produciendo en los saberes y haceres comunitarios. Para ello, desde la Universidad Bolivariana de las Comunas proponemos desplegar una serie de acciones que nos permitan cumplir con estos propósitos estratégicos, tanto para la producción de conocimientos propios de una institución universitaria, como para la edificación de la vida en comunidad que es la base central del nuevo modelo civilizatorio definido como Socialismo Bolivariano.
En concordancia con estos propósitos, en esta linea de trabajo se despliegan procesos investigativos desde la perspectiva de las comunidades, en los que las personas que las integran, son las que aporten de primera mano sus vivencias, experiencias y concepciones sobre la organización y autogobierno comunal, así como del Poder Popular. Chávez varias veces llamó a gobernar bajo el principio de “mandar obedeciendo” esto nos podría indicar un método de investigación que funcione bajo este principio, que implica “primero escuchar al pueblo” para poder acercarnos a nuestras propias realidades. En este sentido, proponemos enfocar la atención en cómo la población está percibiendo sus propios procesos políticos y económicos, cómo ve sus propias organizaciones e instituciones comunitarias, lo cual, es necesario para saber quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos. A través de esta estrategia metódica, podríamos adquirir la capacidad de mejorar procesos comunitarios para poder llegar a ser más efectivos y eficaces en las políticas públicas nacionales y comunitarias, en los financiamientos y en las decisiones cotidianas que nos lleven a superar el orden destructivo de la modernidad capitalista.
Para ello desplegamos el proyecto Ampliando la Percepción Personal Comunitaria Hacia la Comunidad de Vida, que busca crear condiciones para adquirir coherencia personal que nos permita alcanzar la congruencia colectiva necesaria para transmutar la sociedad moderna capitalista hacia la Comunidad de Vida.
Este proyecto en su trayecto inicial cuenta con 4 etapas:
- Consulta de Autopercepción Comunitaria
- Consulta Autoreflexiva para la Autoformación
- Autocartografía para la Comunidad de Vida
- Autotransmutación Comunitaria para el Vivir Viviendo
La Consulta de Autopercepción Comunitaria busca identificar cuáles son las valoraciones, concepciones y organicidad que tienen las y los integrantes de las comunidades participantes en torno a las categorías; comuna, comunidad y familia. Este paso, es importante para iniciar procesos de identificación de atributos, potencialidades y nudos críticos locales y regionales que permitan realizar diversas caracterizaciones especializadas para promover experiencias que apunten a la vida en comunidad y a su vez, poder detectar desviaciones o carencias organizativas en los sectores populares. De igual forma, identificar el tipo de tecnologías que se están desplegando consciente o inconscientemente en el territorio nacional y poder realizar las alertas tempranas en los casos que sean beneficiosas o perjudiciales, proyectando la colaboración y articulación con otras instituciones de competencia en Comunas y Poder Popular.
Las otras tres etapas del proyecto son vinculantes a la Consulta de Autopercepción Comunitaria, como procesos de caracterización territorial para la ampliación de la percepción y autopercepción comunitaria y en algunos casos de potenciación, según las particularidades de cada comunidad, previamente consultada; con el propósito de conocer los atributos y las potencialidades de cada comunidad participante, esto nos permitirá desplegar estrategias de investigación y educación que den respuesta a las características geovivenciales (ambiente, culturas, familias, organización (es) y sistema (s) económico (s), entre otros rasgos) de las comunidades y/o comunas.